Cebollino

Cebollino (Allium schoenoprasum)

Proviene de América del Norte, pero también de Europa y el norte de Asia. Sus hojas largas y delgadas y sus tallos florales son sabrosos, al igual que los cogollos verdes. Si bien los compuestos de azufre repelen a la mayoría de los insectos, sus bonitas flores rosadas atraen a las abejas. La savia de las hojas protege a la planta de las infecciones por hongos.

El sabor y el olor del cebollino son ligeramente parecidos a los de la cebolla. Se puede combinar con cilantro, eneldo, hinojo, rábano picante, pimentón, perejil y estragón.

Información nutricional Las cebolletas son ricas en compuestos orgánicos de azufre y tienen fuertes efectos antitumorales. La colina contenida en el cebollino es un apoyo durante los ataques de enfermedades. La vitamina A mejora la visión, mientras que el magnesio asegura una buena función nerviosa y muscular. Las cebolletas también son útiles para la mala circulación sanguínea, la fluctuación de la presión arterial, los problemas respiratorios, la aversión a la comida y la indigestión, así como para los dolores de garganta y las quemaduras solares.

Uso en la cocina                                                                                                                                  Las cebolletas se pueden utilizar como guarnición. Finamente molida o en rodajas es uno de los componentes de las finas hierbas. Tanto las flores como los tallos son comestibles. Se puede utilizar en aderezos para ensaladas, mantequilla de hierbas, sopas, pescado, sándwiches, platos con huevo, patatas, etc.

Efectos medicinales                                                                                                                                El cebollino es rico en vitaminas A y C. Contiene calcio, hierro, potasio y ácido fólico. Fortalece uñas y dientes. Tiene propiedades antibióticas. Las cebolletas son un repelente de insectos natural.

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Según Power of Herbs de Gill Davies (Worth Press Ltd, 2015), pág. 32