Cardo mariano

Cardo mariano (Silybum marianum)
Proviene de la zona subtropical. Se puede encontrar en jardines como planta ornamental (similar a los berros). Recientemente, se está empezando a cultivar en mayor medida en cultivos de campo.
Se recolecta el fruto (semilla), hoja y raíz.
Justo antes de madurar, se cortan todas las cabezas esponjosas y se dejan madurar en lugares aireados y secos. Las semillas se obtienen trillando y quitando la pelusa. La semilla madura es de color negro o marrón oscuro. Se deben utilizar guantes durante todo el trabajo para proteger las manos de pinchazos. A gran escala, la recolección se realiza mediante cosechadora.
En la medicina popular también se utiliza una hoja, que se recolecta en mayo y junio por la tarde. Ocasionalmente también se utiliza la raíz, extraída en los meses de primavera.

El medicamento se administra en forma de polvo o infusión y es un excelente remedio para prácticamente todas las enfermedades del hígado y la vesícula biliar, incluido el daño al hígado por rayos X. No sólo trata el hígado graso y regenera las células del hígado, sino que también trata el daño hepático en alcohólicos.
El caldo de semillas ayuda a la producción de leche materna.
En la convalecencia tras una ictericia infecciosa se administra una infusión de cardo mariano en combinación con celidonia, lo que potencia su eficacia.
El cardo mariano es también uno de los mejores antidepresivos.
La silimarina es sólo ligeramente tóxica y no se conocen contraindicaciones. Nunca trituramos las semillas para convertirlas en caldo, ya que rápidamente se vuelven rancias y se deterioran.
♦Infusión: Verter 1 cucharadita de semillas molidas con una taza de agua hirviendo y dejar en infusión durante 20 minutos. Bebemos 2-3 tazas al día.
♦Polvo: mezclar semillas recién molidas en una proporción de 1:2 con azúcar de la leche y utilizar 4-5 cucharaditas al día.
Es mejor y más eficaz utilizar las semillas directamente que la infusión.